The Spanish version is reight after the English version
I have not been very active writing my blog. I am working in a big personal project that is taking my time. I can't wait to be ready so I can share it with you. However, my post today is about two of my biggest sources of happiness: my daughters Antonella and Arianna. They said they wanted to write in my blog....so here they are:
This is from my 13 year old Antonella:
"In life people say bad things happen to bad people but why such a bad thing happen to such an amazing dad? I like to think of it as a lesson from God. My father has taught me amazing things and his injury taught me a lesson that cannot be taught by any ordinary class in school. I learned not to get too comfortable with the life you have because it can change into something completely new in just a matter of days. I was about 10 years old when my dad had his injury, I had no idea it was going to affect our lives so much.
A few days after his surgery, my siblings and I got to see him for the very first time. Seeing my dad hurting so much he could hardly talk and having wires all over his body was probably one of the hardest things to see. That was the moment I realized, Wow! This is more serious than I thought!
It has now been about 3 years since the injury and my dad is getting more independent as each day goes by. Due to the injury my dad is now more worried about keeping our backs healthy. It’s an ongoing battle between me, my sisters and my dad to get us to stop doing flips and tricks all over the house. I have also always wanted a trampoline, but I’m not allowed to have one because I could injure my back or neck. Although I would still love a trampoline and I love flipping around the house, I understand how scared it makes him. It makes me happy to know he cares about me so much!
Having my dad in a wheelchair may change his physical appearance but, he is still Enzo Piscopo, and most importantly he is still my daddy and I thank God every day for blessing me with him. This experience has made me and my family stronger than ever, and has inspired me to become a better and more caring person."
Each of my kids had a very unique and different reaction to my injury. Antonella was always very strong. She was the one that never expressed any concerns. She always acted as she was sure that everything was going to be all right. Seeing her always that strong made me feel proud and gave me so much strength to face whatever was coming my way. I remember when I asked her what color should my wheel chair be, she responded why should we care about the color if it is going to be something temporal. It broke my heart. However, I loved her always positive attitude. She has always expected from me the same or more than before my injury. She does not give me any slack....and I love it. She made my heart burst when before her Middle School Talent Show she said:
"I dedicate this dance to My dad who is my inspiration"
And this is from my 7 year old Arianna:
"Hi!, I’m Enzo’s daughter, Arianna. I love my dad and I don’t care if he’s in a wheel chair ‘cause it’s actually kind of fun! I get to sit on his lap and he gives me a ride! And I think it’s special that he is in a wheel chair. When he went to the hospital, I didn’t know he was going to be in a wheel chair I thought he was just a little sick and he would come back from the hospital soon. But when I went to the hospital he told me he was going to be in a wheel chair I felt weird because that never happened to me before . I was also very worried! In my head I was asking myself “how is it like having a dad in a wheel chair?” and I didn’t know he had to do all that work just because he was in a wheel chair. He has a kind of chair that brings him up and down stairs and “it’s really cool!”. I love my daddy."
Arianna, as opposed to Antonella, was the one that showed the most concern, anxiaty and sadness. She would break my heart. Several times she came to me and said: "Daddy how much I wish you were not on a wheel chair" or "Daddy hospitals lie, they took you to get you better and you came back on a wheelchair". She always talks about my wheelchair. She is much better now. She is constantly letting her kisses invade my face. Each kiss fuels me with energy to continue this journey. As long as I continue getting her kisses I know I will be all right.
I dedicate this blog to my 4 kids. They are my biggest source of happiness. Their smiles, their hugs, their words, their love give the most sense to my life! I love you Rafa, Anto, Ari y Sabri.....next blog will be by Rafa and Sabri....may be :)
Dos de mis fuentes más grandes de alegría
Últimamente he estado un poco apartado de mi blog. En realidad, estoy entregado a un importante proyecto personal que me está ocupando mucho mi tiempo. Espero tener este proyecto listo pronto para compartirlo con ustedes. Sin embargo, la página de hoy en mi blog la ocupan dos de mis fuentes más grandes de alegría: mis hijas Antonella y Arianna. Ellas manifestaron interés en participar en mi blog y ahí va lo que querían decir.
Mi hija Antonella, de 13 años, escribió:
"La gente dice que las cosas malas ocurren solamente a las personas malas, pero yo me pregunto por qué esto tan feo le ocurrió a un papá tan bueno. Me tranquiliza pensar que es como una lección de Dios. Mi papá me ha enseñado cosas increíbles y con su lesión he aprendido cosas que nunca habría podido aprender en una clase normal en la escuela. Me enseñó que uno no debe acostumbrarse demasiado a las cosas que uno tiene en la vida pues todo puede cambiar en cuestión de días. Yo tenía 10 años cuando mi papá sufrió la lesión y no tenía idea de que eso cambiaría tanto nuestras vidas. Mis hermanos y yo pudimos ver a mi papá unos días después de la cirugía. Probablemente lo más difícil para mí fue verlo con tubos conectados a todo el cuerpo y tan adolorido que ni siquiera podía hablar. Fue en ese momento que dije, ¡guau! ¡Esto es más serio de lo que yo me imaginaba!
Han pasado ya 3 años desde que mi papá sufrió la lesión y cada vez es más autónomo. Debido a su lesión, mi papá se preocupa más por la salud de nuestras espaldas. Hay una lucha constante entre mis hermanas, yo y mi papá, quien quiere a toda costa que dejemos de hacer piruetas en la casa. Yo siempre he querido tener un trampolín, pero no puedo porque podría lastimarme la espalda o el cuello. Aun cuando definitivamente me gustaría tener un trampolín y me encanta hacer piruetas en la casa, entiendo que esto lo asusta mucho. Sin embargo, me siento tan feliz al saber que mi papá se preocupa tanto por mí. El hecho de que mi papá esté en una silla de ruedas puede que cambie su apariencia, pero sigue siendo Enzo Piscopo y, lo que es más importante, sigue siendo mi papi y agradezco a Dios todos los días por haberme bendecido con este papá. Esta experiencia nos ha fortalecido a todos en la familia y me ha ayudado a ser una persona mejor y más solidaria".
Cada uno de mis hijos reaccionó de manera diferente ante mi lesión. Antonella ha sido siempre muy fuerte y nunca mostró preocupación o inquietud alguna. Siempre estuvo segura de que todo se resolvería de la mejor manera. Ese control de sí misma me hizo sentir orgulloso y me dio la fortaleza que necesitaba para enfrentar cualquier obstáculo que se me presentara. Recuerdo cuando le pregunté de qué color debería ser mi silla de ruedas y ella me respondió que por qué teníamos que preocuparnos por el color de la silla cuando se trataba de algo temporal. Eso me partió el corazón. Sin embargo, me encanta su actitud siempre positiva. Ella siempre ha esperado de mí lo mismo o más de lo que esperaba antes de que yo sufriera la lesión. No me da tregua, y eso me encanta. Antonella hizo que mi corazón estallara de felicidad cuando en el show de talentos de la escuela secundaria dijo, "Le dedico este baile a mi papá, la fuente de mi inspiración".
Y esto es lo que mi hija Arianna, de 7 años, escribió:
"Hola; soy Arianna, hija de Enzo. Yo amo a mi papá y no me importa que esté en una silla de ruedas porque ¡es divertido! ¡Yo me siento en sus piernas y él me lleva a dar vuelticas! Además, creo que es una cosa especial que él esté en una silla de ruedas.
Cuando él se fue para el hospital, yo no sabía que iba a necesitar una silla de ruedas. Pensé que solo se sentía un poco mal y que pronto regresaría del hospital. Pero cuando yo fui para el hospital y él me dijo que estaría en una silla de ruedas, sentí algo extraño porque nunca me había pasado algo así. ¡También estaba muy preocupada! En mi cabeza me preguntaba cómo sería tener un papá en silla de ruedas. Además, no podía imaginarme todo el trabajo que tenía que hacer por el solo hecho de estar en una silla de ruedas. Mi papá tiene una tipo de silla que le permite subir y bajar las escaleras que es ¡calidad! Yo amo a mi papá".
A diferencia de Antonella, Arianna mostró siempre mucha preocupación, ansiedad y tristeza. Me partía el corazón verla así. Varias veces se acercó a mí para decirme, "Papi, cómo quisiera que no estuvieras en una silla de ruedas" o "Papi, los hospitales mienten; te recibieron para ayudarte a que te mejoraras y te devolvieron en una silla de ruedas".
Ella siempre habla de mi silla de ruedas. Ahora está mucho mejor. Constantemente me llena la cara de besos. Cada beso me da la energía para seguir adelante. Mientras tenga sus besos, yo sé que estaré bien.
Dedico esta página de mi blog a mis 4 hijos. Ellos son mi mayor fuente de alegría. ¡Sus sonrisas, sus abrazos, sus palabras, su amor dan sentido a mi vida!
Rafa, Anto, Ari, Sabri, los amo.
La próxima página del blog estará a cargo de Rafa y Sabri.... quién sabe, :)
Thanks God for having children who are reasons for us to be strong.
ReplyDeleteAwesome daughters you have , wishing all the best for them .